viernes, 1 de mayo de 2009
La traducción: el idioma de Europa
El 9 de mayo de 1950, Robert Schuman, Ministro francés de Asuntos Exteriores, presentó su propuesta para la creación de una Europa organizada y en paz. Esta fecha se ha convertido en el “Día de Europa” que junto con la bandera, el himno y el euro identifican la entidad política. La Unión Europea cuenta ya con 27 Estados miembros, 23 lenguas oficiales, 60 lenguas regionales y tres alfabetos. Cada Estado, al adherirse a la Unión, indica el idioma o los idiomas que desea se declaren lenguas oficiales. Esta situación es única en el mundo. El Parlamento Europeo, por ejemplo, trabaja con 23 idiomas, lo que implica 506 combinaciones lingüísticas posibles (los textos escritos en cada una de las 23 lenguas oficiales pueden traducirse a las otras 22). En ocasiones, resulta difícil encontrar profesionales que dominen la lengua de la versión original de un documento, sobre todo, si se trata de lenguas minoritarias, por lo que el Parlamento ha adoptado un sistema de pívot que consiste en traducir primero los textos a las lenguas más utilizadas (inglés, francés o alemán) y después al resto de idiomas. No es de extrañar que Humberto Eco afirmara en su día: “La traducción es el idioma de Europa”.